Balance de vida para disfrutar de los éxitos económicos, profesionales y personales
Desde muy temprana edad escuchaba a mi padre hablar sobre la importancia de tener
organización y balance en la vida empresarial. El explicaba que los comerciantes (refiriéndose a los emprendedores), muchas veces descuidan su salud de una forma exagerada que no les permite llegar al retiro para disfrutar de sus éxitos económicos y profesionales como lo habían sonado al emprender.
Todo lo contrario muchos llegan enfermos, desgastados, con una familia quebrantada de tanta ausencia y una cuenta de banco que hay que cuidar para poder pagar costosos tratamientos y medicamentos.
Pensé que no me pasaría a mí
En mi vida de emprendedora he escuchado a tantos decir “pensé que no me pasaría a mí, que podría manejar adecuadamente mi vida empresarial sin darle paso a una enfermedad provocada por el descuido de no tener una atención oportuna”.
La realidad es otra, inmediatamente te sumerges en las demandas y presiones que ofrece el día a día de un emprendedor, sin proponérselo, te ciegas y comienzas a correr hacia la meta de lograr los grandes planes y el éxito.
En esos momentos no se piensa en la salud que silenciosamente se va afectando con situaciones pequeñas y grandes que pasamos por alto.
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Para un emprendedor, trabajar largas horas sin descanso, es algo normal porque enfrenta múltiples responsabilidades que no puede delegar a otros.
Muchas veces con fuertes presiones que lo llevan a un agotamiento emocional y físico (fatiga crónica, falta de energía). Y si a todo eso le sumamos la falta de tiempo para la familia y los amigos lo cual crea un cuadro de tensión en las relaciones personales y sociales contribuyendo a insatisfacción y estrés.
El temido estrés, siempre llega, y sin un manejo oportuno en silencio se va instalando en la vida de los emprendedores que quizás están enfocados en enfrentar una serie de desafíos como las finanzas del negocio, los empleados, los clientes, la necesidad de tomar decisiones importantes.
Sin embargo, sabemos que el estrés muy prolongado puede causar graves problemas cancerígenos, cardiovasculares, provocar falta de sueño a pesar del cansancio, ansiedad y depresión causando un impacto muy negativo en la salud física y mental de los emprendedores.
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Algo que agrava este tema de salud física de un emprendedor es que su vida se vuelve muy sedentaria al no disponer de tiempo para ejercitarse regularmente y tener una alimentación poco saludable, aumentando el riesgo de enfermedades como la diabetes, obesidad, y otros problemas de salud.
Afortunadamente, darse cuenta a tiempo puede ayudarte a reconocer que quieres el éxito de tu empresa pero no a costa de tu salud o perdiendo a tu familia.
Así como marcas metas y planes de proyectos en tu empresa también los puedes marcar para tener un balance efectivo en tu vida personal.
Siendo sincera establecer límites entre el trabajo y la vida personal puede sacarte de tu zona de confort. Pero si comienzas despacio, haciendo horarios específicos de trabajo, cómo poner en tu agenda el tiempo libre en el que te desconectarás del trabajo para recargar energías, dedicarte a un hobbie o actividades personales.
Las técnicas de manejo del estrés, como la respiración profunda, la meditación o la visualización. Estas herramientas ayudan mucho a mejorar tu capacidad para reducir la ansiedad y la presión del día a día, además de promover un mayor bienestar emocional.
Algo indispensable para lograr este equilibrio entre trabajo y vida personal es no tener miedo en pedir ayuda cuando sea necesaria. Poder hablar con un familiar, un amigo o un mentor sobre tus preocupaciones o sentimientos puede aliviar el estrés y poder ver las dificultades desde otra perspectiva.
Alimentarse saludablemente y hacer ejercicios no es tan fácil, ya que requiere de tomar una decisión que cambiará un desorden con tu horario alimenticio a una rutina diaria más saludable. Preparar comidas caseras (nutritiva y equilibrada) siempre que sea posible es una excelente elección y evitar los alimentos procesados y pocos saludables que se consumen por rapidez y ahorro de tiempo.
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Todo esto combinado con la decisión de hacer una rutina de ejercicio físico que puedes comenzar poco a poco, haciendo 1 o 2 días a la semana, luego 3, 4 y 5 días.
Esto te mantiene físicamente en forma, sentirás un torrente de energía, más concentración en tus proyectos, mejora tu salud mental al reducir el estrés y aumentar la producción de endorfinas.
Como emprendedores debemos reconocer la importancia de cuidar la salud creando un
balance mientras vamos buscando el éxito empresarial. Por ningún motivo podemos negociar nuestra salud física y mental, ya que es el activo más preciado e invaluable que poseemos.
Si aún no tienes estos hábitos de balance entre vida empresarial y personal, comienza realizando micro-pasos saludables de autocuidado (ejercicios, alimentarse bien, dormir lo suficiente, tomar vacaciones, socializar más).
Estas buenas prácticas contribuyen de forma significativa a enfrentar los desafíos que se presentan, y alcanzar la plenitud del éxito profesional y personal sostenible y equilibrado en el tiempo.
